jueves, 13 de septiembre de 2012

Es puro cuento...



Un Rey soñó que había perdido todos los dientes. Después de despertar, mandó llamar a un Sabio para que interpretase su sueño.

- ¡Qué desgracia mi señor! - exclamó el Sabio - Cada diente caído representa la pérdida de un pariente de vuestra majestad.

-¡Qué insolencia! - gritó el Rey enfurecido - ¿Cómo te atreves a decirme semejante cosa? ¡Fuera de aquí!

Llamó a su guardia y ordenó que le dieran cien latigazos. Más tarde ordenó que le trajesen a otro Sabio y le contó lo que había soñado. Este, después de escuchar al Rey con atención, le dijo:

- ¡Excelso señor! Gran felicidad os ha sido reservada. El sueño significa que sobrevivirás a todos vuestros parientes.
Se iluminó el semblante del Rey con una gran sonrisa y ordenó que le dieran cien monedas de oro. Cuando éste salía del Palacio, uno de los cortesanos le dijo admirado:

- ¡No es posible! La interpretación que habéis hecho de los sueños es la misma que el primer Sabio. No entiendo porque al primero le pagó con cien latigazos y a tí con cien monedas de oro.

- Recuerda bien amigo mío - respondió el segundo Sabio - que todo depende de la forma en el decir... uno de los grandes desafíos de la humanidad es aprender a comunicarse.

 Cuento extraído del blog: http://nodiscrimine.blogspot.com.es/

Ay, la comunicación...ese desafío diario. Tan sólo quiero añadir lo que apuntaba Peter Drucker: "Lo más importante de la comunicación es escuchar lo que no se dice". ¡Feliz Viernes 13!

1 comentario:

Susana dijo...

¡Feliz Jueves 13! ;-)